martes, 1 de octubre de 2013

Carrera del corazón








El domingo pasado participe en la carrera del corazón que cubría la distancia de 10 km. Aprovechando que Albert estaba aquí el fin de semana, decidimos que participaríamos hace ya unas semanas y también se lo dijimos a nuestro amigo Rolan. Siempre es más divertido ir a las carreras con más gente y Rolan siempre es buena compañía.

Nos tomamos esta carrera como un entreno más, ya que estamos comenzando la temporada. Así que dijimos a Rolan (que es un maquinilla) que se pusiera en los primeros puestos de la salida y nosotros nos fuimos más hacia atrás, no queríamos estorbar a la gente que fuera más rápido y tampoco queríamos forzar nuestro ritmo, que como ya he comentado iba a ser bajo.

Una vez comenzada la carrera y después de pasar los dos primeros kilómetros un poco de sube y baja Albert me dijo que él quería ir más tranquilo y yo fui tirando. Mi intención no era ir muy deprisa, pero su ritmo era un poco inferior al mío, así que, poco a poco, fui avanzando. En ningún momento miré el crono, ni siquiera me había puesto el garmin, no tenía ni idea de a qué ritmo iba y sinceramente, tampoco me importaba. Fui así toda la carrera, las sensaciones eran buenas y no iba nada forzada.
Al llegar a meta vi el tiempo y, aun siendo un tiempo muy discreto, estaba contenta.

La historia de esta carrera podría acabar aquí, pero no...
Al día siguiente vi que había quedado cuarta en mi categoría: Veteranas A. Al principio dije: "¡Qué bien!" y me picó la curiosidad de saber qué tiempo había hecho la tercera. Pensé: "Seguro que hay mucha diferencia". Pero, ¡Sorpresa!, miro la clasificación y aunque yo aparecía la cuarta,  ¡Realmente había quedado tercera con dos segundos menos!!!!. Sin embargo, como había entrado en meta después, eso hace que apareciera la cuarta.
Así que, sin pretenderlo, había hecho muy buena clasificación, lástima no haberme colocado mejor en la salida.
La verdad es que esto me motiva mucho para seguir con los entrenos que, si todo va como Albert y yo pensamos, nos conducirán a la Maratón de Barcelona, pero todavía queda mucho para esa gran cita...
 

martes, 23 de julio de 2013

L'Olla de Núria 2013

Me ha costado comenzar a escribir este blog. Nunca encontraba algo lo suficientemente importante como para que mereciera unas palabras.
Después de una carrera nocturna en la que se promocionaba la candidatura de Madrid 2020, pensé que era un buen momento, pero al final no escribí nada. Con los entrenos que estaba haciendo en montaña, subiendo a Peñalara, Bola del Mundo, Mare de deu del Mon, ... también pensé que era algo que podría ser interesante, pero tampoco me puse a escribir. Una nueva oportunidad para iniciar el blog fue la pequeña aventura que pasamos Albert  y yo cuando, de un día para otro, decidimos ir a ver la etapa del tour que subía al Mont Ventoux, pero tampoco me salieron las palabras.

Pero ahora sí, ahora creo que ha llegado el momento de dejar plasmado en este blog algo que me parece importante. Un reto que me planteé hace tiempo y que ahora he conseguido: participar en la carrera de montaña L'Olla de Núria.



Era una idea que ya hace dos años que me rondaba por la cabeza porque fui a ver como corría mi novio, Albert. Yo por aquel entonces estaba recien operada de un mioma y comenzaba otra vez a entrenar, así que sí que pude subir a uno de los picos para animarle. Fui muy bonito ver como pasaban los corredores y paraban en el avituallamiento y como todos los que estábamos por allí animábamos e intentábamos contagiarles nuestra energía a través de los aplausos y los gritos de ¡vamos! ¡estás a punto de conseguirlo, no pares!, etc.

Dos años después, soy yo la que he participado como corredora. Y de esto le tengo que dar las gracias a Albert, que es el que me animó y estuvo a las doce de la noche del día de las inscripciones, pegado al ordenador para conseguir un dorsal. Y creerme, es difícil conseguirlo, ya que en 20 minutos volaron las 650 inscripciones disponibles: Moltes gràcies carinyo!

Yo ya había hecho algunas carreras de montaña y me habían ido bien, pero ninguna como esta. L'Olla de Núria, a parte de que se desarrolla en un paraje de montaña absolutamente impresionante, tiene unas características que la hacen, a mi parecer, realmente especial.
El recorrido comienza y acaba en frente del Santuario de Núria. Se recorren  21,5 km, con un desnivel positivo de 1940 m y otros 1940 m de desnivel negativo. No se pisa un solo metro de asfalto,  el 72% de la carrera se realiza por encima de los  2700 m de altitud y hace ya dos años que es una carrera en autosuficiencia, es decir, no hay avituallamientos en altura, con lo que cada corredor tíene que llevar lo que estime necesario (agua, geles, barritas,...). Creo que para personas como yo, que se están iniciando en el mundillo de las carreras de montaña, es un reto más que interesante.

Lo que también hace especial a esta carrera, es que tienes que hacer noche en uno de los pueblos cercanos, porque se tiene que hacer una aproximación en tren cremallera hasta el lugar de donde parte la carrera y se sale a las 7 de la mañana.
Así que ya comienzan los nervios con el viaje hasta llegar hasta allí, en mi caso 2 horas, ya que salíamos de Torroella de Montgrí. Íbamos Albert y yo, llegamos sobre las 20:30, buena hora para dejar las cosas en el hotel y salir a cenar prontito. Después, pequeño paseo por el pueblo y a dormir, que el despertador sonaría a las 6:00 de la mañana.

Antes de las 7, Albert ya me había dejado en Queralbs  (el pueblo desde donde salía el cremallera sólo para corredores). Y allí estaba yo, sola, rodeada de gente que siempre te parece que está más entrenada que tú. El cremallera llegó antes de las 7:30 a Núria y, como la carrera no empieza hasta las 9, te da tiempo de sobra para recoger el dorsal y desayunar. Una vez hechas estas cosas, tienes mucho tiempo para observar al resto de la gente.

Y ahí es cuando empiezan los nervios de verdad. Empiezas a ver a gente que está muy fuerte, con camisetas de carreras muy duras y te preguntas ¿Realmente estoy preparada? ¿ Y si me da la pájara en medio de la carrera? Además sientes un poco la presión porque, en mi caso, había gente que se había dado un madrugón de narices  e iban a dedicar su mañana de domingo para animarme (Sergi, Joan, Carles,moltes gràcies per venir a donar-me suport i fer-me costat, no sabéis lo que se siente cuando vas en carrera y ves a gente conocida que te da ánimos, las piernas vuelaaaaan!),  y claro, nervios en la tripa, varias visitas al lavabo..., ya se sabe...



Nueve de la mañana, 3,2, 1  y comienza la carrera. Hay ya es todo diferente, la montaña se presenta igual de empinada para todos. Me coloco de la mitad para atrás del pelotón, (siempre es mejor adelantar a gente a que te adelanten) y voy teniendo muy buenas sensaciones y siempre pensamientos positivos en la cabeza: "Arantxa vas muy bien" , "Venga, sigue".

Primer objetivo conseguido: Puigmal. Sé que viene una bajadita y volver a subir Pic Negre, otra bajada y encontraré a Albert que me estará esperando para acompañarme un tramo de carrera. Me lo encuentro, me pregunta: "Ei, com vas noia?  Vols alguna cosa?" y yo le digo: "Molt bé, noi, per ara no necessito res". Me va diciendo que regule, que no vaya muy rápido, que todavía me queda mucho, que guarde hasta llegar a Noucreus, una vez allí, que me vacie. Yo le hago caso, no quiero ser muy atrevida y que luego me venga el bajón.


Después de acompañarme un rato, Albert marcha hacia abajo para poder verme en la meta.Vuelvo a estar sola, pero con muchas energías después de los ánimos de Albert. Sé que tengo la subida a Noufonts, bajada un poco técnica, así que tendré que ir con cuidado y otra subida hasta Noucreus, pero por ahora las piernas funcionan bien. Me voy acercando a Noucreus y sé que allí estarán Sergi, Carles y Joan. De pronto, veo a Carles que me anima y me acompaña, Joan haciendo un video y Sergi haciendo fotos, subidón de energía!!, es emocionante ver a la gente animándote, Moltes gràcies altre vegada nois!!.


Sé que queda poco y me siento bien. Después de la bajada, que también tiene algún tramo interesante, escucho a un hombre de la organización diciendo, sólo os queda una subida, venga ánimo!, es verdad, sólo queda la subida a Font Negre y todo será bajada. Esta subida cuesta un poco, pero se hace bien y ahora a disfrutaaaaar de la bajada!!
Realmente me sentía bien, energía en las piernas y mucha alegría porque estaba a punto de conseguirlo. Y por fin, llegada a Núria, primero veo a Sergi, después a Carles y por último a Albert dándome los últimos ánimos. Cruzo la meta. Ahora sí, ahora sí, reto conseguidooooooooooooooo!!!


Realmente, en estos momentos te sientes muy bien, de alguna manera, te sientes importante por conseguir lo que te has propuesto. Además, acabada la carrera tengo muy buenas sensaciones, no tengo dolores musculares y no me encuentro muy fatigada. Y son estas sensaciones las que me hacen pensar en nuevos retos...